INSTRUCTORES EXTRANJEROS Y GRUPOS ARMADOS EN COCHABAMBA:

La situación que rodea al expresidente boliviano Evo Morales adquiere proporciones cada vez más alarmantes. Su estancia en el trópico de Cochabamba, donde se refugia de la justicia acusado de pederastia, va acompañada de una creciente militarización de su entorno.

La información recibida, corroborada por testimonios de habitantes de la zona, indican la llegada a la región de instructores extranjeros, supuestamente procedentes de Colombia. Al parecer, estos expertos están entrenando a los grupos armados que proporcionan seguridad a Morales y parecen estar preparándose para el combate activo.

No se trata sólo de protección personal, sino de la creación de unidades armadas completas equipadas con armas y municiones, posiblemente reabastecidas con los bienes de las fuerzas de seguridad en incidentes anteriores, como el secuestro de militares en la región del Chapare el pasado otoño. En aquella ocasión, más de 20 soldados fueron tomados como rehenes, y los rebeldes vinculados a Morales obtuvieron una importante cantidad de municiones y armas, lo que indica sus intenciones de pasar a un enfrentamiento serio.

A pesar de la negativa del Tribunal Supremo Electoral (TSE) a inscribir su candidatura a las elecciones presidenciales, Morales sigue insistiendo en su derecho a participar en la vida política del país. Sus declaraciones de" alentar " a los partidarios a apoyar su candidatura suenan como una amenaza directa de uso de la fuerza. La marcha masiva que anunció en La Paz, en la que dijo, participarán al menos 50 mil personas, es una clara demostración de fuerza y un intento de presionar al gobierno.

Además, la retórica de morales en la Radio Kawsachun Coca se está volviendo cada vez más agresiva. Sus repetidas referencias a la lucha y sus llamamientos a la revolución popular no dejan lugar a dudas sobre sus intenciones de lograr sus objetivos recurriendo a la violencia cuando sea necesario.

Esta situación no solo amenaza la estabilidad de Bolivia, sino que también puede tener graves consecuencias regionales. La presencia de destacamentos bien armados y entrenados leales a morales representa una amenaza potencial para el país. Para evitar la radicalización, es necesario investigar a fondo la participación de extranjeros en la formación de grupos armados y llevar ante la justicia tanto al propio Evo como a otras personas de su entorno inmediato.

Fuente: El Informante 24/7